“Somos campeones mundiales en desear y no tener”

El Menú

Loca por el Trabajo | Tiempo Compartido | La Maestra de Kinder | Matar o Morir | Wifi Ralph | Animales Fantásticos: Los Crímenes de Grindelwald

     Deje todo y corra a verla
    No se la pierda
   Vale la pena
⋆ ⋆ Puede verla
 No se moleste
•Evítela como la plaga

 

El aperitivo

⋆ ⋆ Puede verla

Tras haber tenido un personaje secundario en Ni tú ni yo (2018) donde sacó a relucir su físico, Bárbara de Regil protagoniza ahora Loca por el trabajo, comedia mexicana y remake de la versión brasileña De Pernas pro Ar (2010), donde Alicia descubrirá abrupta y cómicamente que su trabajo la han alejado de su vida familiar y sentimental-sexual; encontrando en el mundo del sex-shop la oportunidad de auto-reencontrar su sexualidad y su faceta empresarial bajo el lema: “tú no escoges el artefacto, el artefacto te escoge a ti”.

Aunque cae en el cliché machista de que una mujer sin sexo es una mujer histérica, su narrativa en forma de comedia de enredos, y que se alimenta de un juego de palabras que caen en el albur y dobles sentidos, propone un par de cosas que la salvan de ser ramplona haciendo referencia por ejemplo, al conejo de “Alicia en el país de las maravillas”, o incluso, a la escena del hueso de 2001: Odisea en el espacio.

El asunto de la sex-shop le permite jugar con ocurrencias como una ropa interior que vibra a al ritmo de la música, y proponer por otro lado de que el placer sexual no es exclusivo de las parejas hétero y jóvenes, o contraponer que aunque el disfrute sexual es algo reproblable o morbosamente aceptable en público, hay también parejas o personas que tienen derecho a buscar otras maneras nuevas de estimularse.

Adicta al trabajo es un ir y venir de querer proponer alternativas a lugares comunes sobre la sexualidad y las relaciones personales, que aunque bien intencionados, unas pegan y otros más se quedan y dispersan en el camino, buscando como siempre la risa fácil de la mano de una historia donde la premisa pondera el éxito personal y reconocimiento social, pero en donde nada de esto importa si no se comparte con la familia.

 

El Entremés

⋆ ⋆ ⋆ Vale la pena

En Tiempo Compartido lo que vemos es cómo unas vacaciones de ensueño se van convirtiendo poco a poco en toda una pesadilla, rodeada siempre de un halo rojizo como quien desciende al infierno, y donde uno no se sabe en ella hasta que la situación se vuelve intolerable y enloquecedora.

Los prejuicios de Pedro (Luis Gerardo Méndez) saldrán a flote cuando tenga que compartir, sí o sí, la villa vacacional con Abel (Andrés Almeida) y su familia. A Eva (Cassandra Ciangherotti), la esposa de Pedro, junto a su hijo, no parece importarles tanto, incluso se comienzan a sentir cada vez más cómodo con ello; pero Pedro comenzará sospechar que tanta incomodidad no puede ser un error, y que alguien debe estar detrás de todo.

Paralelamente también vamos conociendo a Gloria (Montserrat Marañón) y Andrés (Miguel Rodarte), dos empleados del hotel, ella en el umbral de un posible ascenso y él en limen de un posible despido, lo que sacará a la luz los demonios de él, mientras ella se volverá una aliada del “diablo” con tal de reclutar a más creyentes del “paraíso”.

Con una composición de colores cítricos neón, y una música maquiavélicamente tétrica, Tiempo Compartido entremezcla aspectos de suspenso, humor negro y drama de terror, para conformar una historia delirante en la que Pedro y Andrés comienzan a llegar a su límite por lo que tendrán que tomar decisiones cruciales, aunque estas pongan en riesgo su integridad familiar.

Nuevamente la intervención de Noé Hernández aunque mínima, logra imprimir un aurea de inquietud a su personaje; y el apunte social sobre cómo se nos vende el paraíso en este mundo capitalista y terrenal, bordean esta historia que a pesar de perder un poco de fuerza dramática al final, logra inquietarnos a lo largo de sus 96 minutos; pues tal y

como vemos en la escena de los créditos finales, no existen ni familias ni vacaciones perfectas.

P.D. Escuche el soundtrack de la película y sumérjase un poco en el paraíso infernal de Tiempo Compartido: https://goo.gl/7PBQ6E

 

El Plato Fuerte

⋆ ⋆ ⋆ Vale la pena

Muchas veces relacionamos las películas de profesoras o profesores, con historias en las que estos sacaron los mejor de sus alumnos aún incluso con métodos pocos ortodoxos (verbigracia: Whiplash, 2014); pero si algo diferenciará a la La maestra de kínder, es que aunque se conserva este mismo espíritu, eso no significa que necesariamente triunfará.

No es que Lisa (Maggie Gyllenhall) sea una mala profesora, sino todo lo contrario, veremos cómo pone un empeño incondicional y extraordinario con sus alumnos de kínder, en contraposición con el ambiente rutinario y poco alentador que reina en su hogar con su familia (quizá evidenciado de manera muy obvia), que al ser de clase media alta, esperaba que fuera al menos un poco más erudita o no tan alineada.

Lisa alimenta esa curiosidad intelectual asistiendo a clases de poesía, pues a pesar de tener una vida convencional y repetitiva, buscará poder encontrar un poco de belleza en ésta; sin embrago aunque es capaz de apreciar y disfrutar un poema (y otras expresiones artísticas), se dará cuenta que no es tan perspicaz para escribirlos, así que cuando descubre que su alumno Jimmy tiene un talento nato para componer versos en su cabeza, hará todo lo posible para alentarlo.

Imagen relacionada

Contrario a la idea que después de una serie de esfuerzos el alumno superará al maestro, aquí la maestra no podrá hacer nada ante un poeta ingénito que la supera y al que comparará con Mozart, por lo que usará su condición de profesora para estar lo más cercano al proceso creativo de Jimmy de una manera cada vez más obsesiva, que pondrán entredicho sus límites sociales y personales para con el niño en pos de la poética.

No sólo Lisa reconocerá la belleza en los poemas de Jimmy, sino en su afán de darlos a conocer al mundo, de procurar preservar la mayor cantidad posible y en su avidez de intentar mostrarle nuevas estímulos artísticos a Jimmy, rayará en el límite de querer inducir su proceso creativo, de inmiscuirse en su vida personal, y de llegar a violar incluso los códigos éticos del autor.

Le dirán a Lisa que es una plagiadora y sólo una fanática de la poesía, pero nunca una artista; pero a ella lo que le preocupa es que este mundo impersonal, fútil y banalizado acabe poco a poco con una voz poética tan genuina, que al tener sólo 5 años, poco podrá hacer ante una indiferencia y despreocupación de su familia y de las instituciones sociales que ignoran su talento. Y aunque lo sabe, Lisa también se niega a aceptar que gran parte del sentido de la poesía está en lo efímero, en su brillo fugaz; y no tanto en la fama o el aplauso intelectual.

Es inevitable al momento de ver La maestra de kínder, no pensar en su versión original de 2014 (Haganenet), con la sustancial diferencia que la israelí es vista a través del niño, y la americana a través de la maestra, donde el oficio actoral de Maggie Gyllenhall le permite construir un personaje contenido en la frustración y lo trágico, al no poder

evitar y combatir el destino al que el Estado condena muchas veces a mentes como las de Jimmy, que a pesar de procurar su bienestar social, muchas veces ignoran sus necesidades intelectuales tal y como se ve en la toma final de la película.

Y ahora, un poema. De Jimmy:

El toro

El toro estaba sólo en el jardín.

Todo oscuro.

Abrí la puerta y salí.

El viento en las ramas.

Me miró, los ojos azules.

Seguía respirando para sobrevivir.

No lo quería.

Yo sólo era un niño.

Dije que sí.

Dije que sí igual.

 

El Postre

⋆ ⋆ Puede verla

Matar o morir es la película que vuelve a poner en el mapa actoral a Jennifer Garner, ahora bajo una historia de acción y venganza en donde hará de chica que tuvo que aprender a ser ruda y vivir al margen del sistema, para poder hacer justicia por propia mano ante la negligencia y omisión intencional de las autoridades.

No hay nada nuevo, la fórmula es llevada a cabo de principio a fin, donde como es de esperarse, tendremos una ‘fiesta de las balas’ apoyada en una trama siempre funcional, y estereotipos clásicos como el de pandillas latinas que creen en la Santa Muerte, una policía astuta que ve entre líneas, y un policía corrupto que recibirá su merecido.

Aunque no es violentamente gráfica, sí logra ser un tanto cruda en algunas escenas de persecución o ejecuciones, volviéndose amena para quienes disfrutan de las secuencias de pelea o acción. La película integra además a las redes sociales como una herramienta para evidenciar actos corruptos, y como generadoras de una opinión pública que cree que el fin justifica los medios cuando hay una razón justa.

Una película que a pesar de ser de fórmula, plantea que a veces lo justo no es necesariamente lo correcto.

 

La Gula

⋆ ⋆ ⋆ Vale la pena

Lo más rescatable de Wifi Ralph es su planteamiento del mundo del internet, el cual con cierta original recrea en su bastedad y diversidad, haciendo que los niños de las nuevas generaciones y padres que le han tenido que entrar a la onda del mundo web, puedan compartir una historia llena de referentes y de cuestiones que ya son parte de nuestro día a día.

La trama se basa en la temática ya clásica de alguien que está harto de vivir lo mismo (Vanellope) y alguien que está feliz con lo que tiene (Ralph), por lo que las peripecias surgirán de esta fricción entre maravillarse con lo nuevo y añorar lo pasado, tal y como nos ha sucedido a quienes hemos emigrado de la era análoga a la digital. Ese es el gancho que Wifi Ralph, de su antecesora y de muchas otras más películas: la añoranza, sólo que en esta ocasión no hay se pretende insinuar cuál época ha sido la mejor, sino que simplemente ahora conviven se quiera o no.

Wifi Ralph aborda también muchos fenómenos del internet y las redes sociales, como la viralización y reciclaje de contenido, los anuncios fraudulentos, el redireccionamiento, el ciberbullying, los virus y demás cuestiones que sirven para poner a prueba la amistad de Vanellope y Ralph y entender que todo nueva era tiene por ende sus procesos de adaptación y cambio.

 

El digestivo

⋆ No se moleste

Animales Fantásticos: Los Crímenes de Grindelwald era una de las películas más esperadas del año, y quizá por eso mismo una de las más decepcionantes. Al no haber visto la primera entrega, éste Cinéfago sentía que estaba en las condiciones necesarias para apreciarla más cinematográfica que fanáticamente.

Posee muchos huecos en su argumento, hay personajes prescindibles, acciones injustificadas o ilógicas, y un uso de los efectos especiales que sostienen este mundo de fantasía a veces de más o innecesaria. Y aún con un guion muy muy flojo, no logra ni si quiera armar una secuencia de acción memorable que haya despertado euforia, emoción o tensión. Quizá un poco la inicial, cuando Grindelwald escapa de su traslado, pero se ve tan Green Screen que el impacto visual se siente forzado.

Resultado de imagen para Animales Fantásticos: Los Crímenes de Grindelwald

Josue_Cinefago

Responder

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Cerrar sesión /  Cambiar )

Google photo

Estás comentando usando tu cuenta de Google. Cerrar sesión /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Cerrar sesión /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Cerrar sesión /  Cambiar )

Conectando a %s